A él le encanta venir a casa y comer las galletas tan ricas que le hace su tía, y a nosotros nos encanta él. Este día,aprovechando que venía a pasar la tarde, él mismo decidió ponerse manos a la obra, manchándose y manchando todo lo que le rodeaba. Menos mal que por lo menos las galletas estaban riquísimas.
1 comentario:
Has optado por un retrato más o menos clásico de tu sobrino trabajando con una masa en la cocina. Bien la pose y también como consigues que los instrumentos que está utilizando aparezcan en escena. Pero creo que la imagen ganaría si la recortaras un pelín por la parte derecha, centrando al personaje principal y eliminando los reflejos de la puerta, que distraen la atención del espectador, y también le dieras un pelín más de espacio por la izquierda, sin cortar la mano del niño. Por lo demás, decir que por el resto, se adapta a todos los requisitos que se especificaban en el enunciado del reto.
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