Para este reto tiempo, decidí huir del estereotipo del reloj
como idea en sí. Escogí dicha foto por varios motivos. El principal fue la
conservación del puente romano de Lugo, el cual a pesar de muchos años después
de su construcción, sigue en pie y en uso pero con ciertos detalles de
desgaste, tales como los hierros oxidados, el moho y la erosión de las piedras.
Otro elemento que refuerza la idea del paso del tiempo es el agua del río Miño
que simboliza la vida y las oportunidades que hay en ella y las cuales las
dejamos pasar. Decir también que al ser una fotografía nocturna, el tiempo de
exposición se aumenta de una forma notable.
A términos compositivos resalto la idea de los reflejos de
los arcos del puente, lo que refuerza la imagen evitando dejar demasiado aire
en la parte inferior de la fotografía y creando un cierto grado de simetría
variable. También vemos que la imagen va de menos a más, donde el extremo
derecho tiene más fuerza y peso. Además, los focos del puente crean una continuidad
y un ritmo compositivo que guía la mirada del espectador.
1 comentario:
Ay, el puente romano... qué motivo más socorrido. Pero está bien, como fotografía nocturna perfecta: muy bien iluminado el motivo, muy bien expuesta la fotografía y también un reflejo muy interesante. Sería fenomenal que hubieras dejado un poquito más de aire por la parte superior, pero por lo demás muy bien.
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